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martes, 27 de diciembre de 2016

ES PELIGROSO SONARSE LOS HUESOS

Es peligroso “sonarse” los huesos


Si bien hay estudios que afirman que puede llegar a ser peligroso, tronarse los huesos llega a convertirse en un vicio, ya que mediante esta acción se nos relajan las articulaciones.


Tronarse, sonarse, o crujir los huesos (como quieras llamarlo), es una práctica muy habitual, sobre todo porque lo usamos para descontracturar. Sin embargo, diferentes estudios indican que es peligroso sonarse los huesos. Están, claro, las razones por las cuáles se llega a esta conclusión. También podrás conocer en este artículo qué es lo que ocurre al oír ese sonido tan particular.

¿Por qué suenan los dedos?

Ese ruido que escuchamos al tronarnos los dedos, las muñecas, los tobillos o cualquier parte del cuerpo se deba a las burbujas que tenemos en el líquido que recubre la articulación, al reventarse. Es bueno saber que las articulaciones son el lugar de contacto entre los huesos y están cubiertas por un líquido “sinovial”, espeso. Cuando se trona, se estira o se dobla un dedo, por ejemplo, la articulación se separa.
La cápsula que rodea esta articulación se estira y aumenta su volumen, disminuyendo su presión. Cuando ocurre esto, los gases sueltos en el líquido sinovial forman burbujas. Al explotar producen ese chasquido particular.
huesos Theen
El gas necesita una media hora para disolverse en el líquido, por ello, una vez que nos tronamos una articulación, se conseja no hacerlo de nuevo hasta 30 minutos después del sonido escuchado. En relación a los riesgos de este hábito tan común, vale decir que no hay demasiadas investigaciones científicas. Se intentó analizar a diversas personas que solían tronarse los dedos par saber si tenían daños en sus articulaciones como ser artritis o artrosis.

domingo, 21 de agosto de 2016

CASO NIÑO DE 13 AÑOS, DIAGNOSTICADO CON IRRITABILIDAD CEREBRAL, POSIBLE EPILEPSIA




CASO NIÑO DE 13 AÑOS, DIAGNOSTICADO CON IRRITABILIDAD CEREBRAL, POSIBLE EPILEPSIA

DESARROLLO DETENIÉNDOSE AÚN CON LA ADMINISTACIÓN DE HORMONA DE CRECIMIENTO


En noviembre del año 2015 llega a mi consultorio José Gregorio, niño  que sus padres definen como rabioso, muy inquieto desde los 4 años. Entre 1er a 3er grado causó muchos problemas en colegio que nadie podía controlar. Refiere su madre que en el embarazo ella se la pasaba llorando y rabiosa. Nació por forceps.

Refería José Gregorio que le daba mucha rabia y tristeza porque sus compañeros en el colegio y en el equipo de futbol le hacían bulling por su poco tamaño y que por las drogas que le daba el médico se ponía lento y le costaba jugar aun siendo un excelente jugador. Se sentía inferior a ellos por el rechazo y la burla. Se definió en la entrevista como impulsivo, perfeccionista, exigente. Se procedió a realizarle liberación emocional con EFT e impactarlo con Biomagnetismo emocional. Les pedí a los padres que hablara con su médico para que le comience a quitar la droga.

jueves, 17 de marzo de 2016